Tensión en el horizonte: Milei enfrenta desafío sindical
El anuncio de una ocupación pacífica por parte de los gremios agita las aguas del Gobierno de Javier Milei. ¿Qué medidas tomará el presidente ante este nuevo frente de conflicto?
El Gobierno liderado por Javier Milei se encuentra en la encrucijada de un nuevo embate sindical, tras la declaración de una ocupación pacífica de organismos nacionales. La controversia se desató a raíz de los planes iniciales de la administración de dar de baja decenas de miles de contratos estatales, una cifra que generó inmediatas reacciones en el ámbito sindical. La convocatoria a la ocupación de ministerios, programada para el próximo 3 de abril, ha encendido las alarmas en el seno del Gobierno, quien ha emitido una advertencia contundente a los dirigentes sindicales, sugiriendo una posible acción legal contra aquellos que participen en la toma de organismos del Estado.
El presidente Milei, ante esta situación, interactuó en redes sociales con un mensaje del abogado Alejandro Fargosi, afín a las ideas de La Libertad Avanza, dejando entrever una posición firme frente a la posible ocupación, señalando que se consideraría como un delito. Esta interacción virtual refleja el tono de confrontación que ha caracterizado las relaciones entre el Gobierno y los sectores sindicales.
Rodolfo Aguiar, secretario general de la ATE, anunció la medida de fuerza en rechazo a los despidos previstos, advirtiendo sobre posibles “ocupaciones pacíficas” en ministerios y dependencias oficiales. Desde su cuenta oficial, Aguiar responsabilizó directamente al presidente Milei por cualquier eventual hecho violento que pudiera surgir durante la protesta.
La convocatoria de ATE a los trabajadores para ocupar masivamente los puestos de trabajo antes de los despidos previstos ha elevado la tensión entre el Gobierno y los sindicatos. Aguiar, en un tono desafiante, expresó su esperanza de que no se repitan episodios del pasado, aludiendo a la militarización de la administración pública y la posible represión policial.
Ante este escenario de creciente confrontación, los sindicatos reafirman su postura de defender sus derechos constitucionales de huelga, manifestación y libertad de expresión. Asimismo, advierten sobre el rechazo absoluto a cualquier acto de represión que pudiera emanar desde el Gobierno central.
